Centro de preferencia de la privacidad x
Cuando visita cualquier sitio web, el mismo podría obtener o guardar información en su navegador, generalmente mediante el uso de cookies. Esta información puede ser acerca de usted, sus preferencias o su dispositivo, y se usa principalmente para que el sitio funcione según lo esperado. Por lo general, la información no lo identifica directamente, pero puede proporcionarle una experiencia web más personalizada. Ya que respetamos su derecho a la privacidad, usted puede escoger no permitirnos usar ciertas cookies. Haga clic en los encabezados de cada categoría para saber más y cambiar nuestras configuraciones predeterminadas. Sin embargo, el bloqueo de algunos tipos de cookies puede afectar su experiencia en el sitio y los servicios que podemos ofrecer.
Más información
Gestionar las preferencias de consentimiento
- Cookies técnicas Activas siempre
Son aquellas que permiten al usuario la navegación a través de una página web, plataforma o aplicación y la utilización de las diferentes opciones o servicios que en ella existan como, por ejemplo, controlar el tráfico y la comunicación de datos, identificar la sesión, acceder a partes de acceso restringido, recordar los elementos que integran un pedido, realizar el proceso de compra de un pedido, realizar la solicitud de inscripción o participación en un evento, utilizar elementos de seguridad durante la navegación, almacenar contenidos para la difusión de videos o sonido o compartir contenidos a través de redes sociales.
- Cookies de análisis o medición
Son aquellas que permiten al responsable de las mismas, el seguimiento y análisis del comportamiento de los usuarios de los sitios web a los que están vinculadas. La información recogida mediante este tipo de cookies se utiliza en la medición de la actividad de los sitios web, aplicación o plataforma y para la elaboración de perfiles de navegación de los usuarios de dichos sitios, aplicaciones y plataformas, con el fin de introducir mejoras en función del análisis de los datos de uso que hacen los usuarios del servicio.
- Cookies de Google Maps
Cookies de Preferencias de Google: Estas cookies permiten que los sitios web de Google recuerden información que cambia el aspecto o el comportamiento del sitio web como, por ejemplo, el idioma que prefieres o la región en la que te encuentras.
- Cookies de publicidad comportamental
Son aquellas que almacenan información del comportamiento de los usuarios obtenida a través de la observación continuada de sus hábitos de navegación, lo que permite desarrollar un perfil específico para mostrar publicidad en función del mismo.
Rechazar todas Confirmar mis preferencias
Cofenat
Blog Terapias Naturales
Información de interés
Entradas
APTN_Cofenat Mon, 15 Mar 2021 01:30:00 +0100

El sistema linfático

El sistema linfático
15 de marzo de 2021


El sistema linfático  drena líquidos, transporta grasas y ayuda en la respuesta inmunitaria ante una infección, sin embargo pese a cumplir funciones vitales muy importantes es uno de los grandes desconocidos, seguro que todos conocemos en mayor o menor medida como funciona el sistema circulatorio pero no asi como funciona nuestro sistema linfático, pues bien, hoy vamos a intentar despejar algunas incógnitas y a colocar a este sistema en la posición que por derecho le corresponde. 

El sistema linfático trabaja en paralelo a la red de vasos sanguíneos colaborando para su correcta circulación, se le conoce como un enorme sistema de “tuberías” por las cuales circula un líquido transparente llamado linfa.

Para esto el cuerpo posee estructuras de aproximadamente del tamaño de un garbanzo llamadas ganglios, que se posicionan formando una especie de ramo en determinadas zonas como ingles, cuello o axilas, pero el cuerpo también posee órganos específicos con funciones linfáticas como son el timo o el bazo.

Linfa

La linfa es un liquido de color transparente que circula por los vasos, está compuesta de un 90% de agua y un 10% por grasas, electrolitos, proteinas y celulas (linfocitos).

Este líquido se mueve circulando por el cuerpo de forma muy parecida a como sucede en el aparato circulatorio pero de forma mucho más lenta, va recogiendo partículas grandes que no pueden atravesar por las paredes venosas hacia el torrente sanguíneo limpiando nuestro organismo, pero también es capaz de detectar infecciones para que nuestro cuerpo fabrique células inmunitarias.




Los vasos  linfáticos

Son los  “tubos” por los cuales circula la linfa, como sucede con las venas y arterias del sistema circulatorio, solo que en este caso no dependen del corazón para su movilización ya que esta red linfática se encuentra dentro de nuestros tejidos y músculos, es a través de estos por lo que se mueven gracias a su contracción, de ahí que como decíamos anteriormente su velocidad sea mucho más lenta.

Seguro que muchos de nosotros alguna vez hemos sufrido un traumatismo que nos ha obligado a estar con una extremidad en reposo, ya sea vendada o escayolada, en esta situación habremos podido observar un claro ejemplo de su funcionamiento, ya que como esta extremidad se encuentra inmovil y con sus estructuras comprimidas muy posiblemente se nos haya producido una inflamación derivada de la retención de dichos líquidos linfáticos que han tenido dificultad para retornar, a esto se le conoce como linfedema.

Ganglios linfáticos

Son los nodos resultantes de la unión de muchos vasos linfáticos, encargados de filtrar y limpiar los residuos y de producir las células inmunitarias que atacan las infecciones, se suelen encontrar en determinadas zonas donde hay “huecos o pliegues” como el cuello, las ingles o axilas.

Normalmente debido a que su tamaño no es muy grande no son fáciles de palpar pero seguro que más de una vez nos hemos tocado  “bultos en la garganta” cuando hemos estado enfermos, esto es debido a que cuando nos encontramos ante una infección, nuestro cuerpo produce muchos más linfocitos para atacar, produciendo un aumento de su tamaño, haciendo más fácil la palpación de estos ganglios linfáticos que una vez superado dicho proceso suelen volver a su tamaño original.

¿Cómo se mueve la linfa?

Antes habíamos descrito de forma muy simple una de las formas por las cuales circula y es capaz de moverse este líquido tan peculiar, pero vamos a describir de forma más completa cómo funciona este mecanismo...




Contraccion muscular:

Como sucede con el  sistema venoso, la contracción muscular facilita el transporte de la linfa, aunque hay que señalar que determinadas actividades musculares muy extremas pueden dificultar el transporte de nutrientes a los tejidos, debido a la cantidad de residuo que se deriva del mismo, pero en líneas generales una actividad que genere movimiento también generará movimiento sobre nuestros vasos y líquido linfático. 

 
La contracción de los vasos linfáticos: 

 
Cuando los vasos linfáticos se llenan, estos se contraen produciendo que la linfa ascienda, a su vez , la contracción de las arterias próximas a estas estructuras también ayudan a que estos vasos se contraigan y la linfa retorne, pero es importante entender que este flujo tiene que trabajar con la resistencia ejercida por la gravedad y este sistema al ser menos potente que el circulatorio hace que su velocidad de retorno sea más lenta, siendo menos eficaz que su compañero, un ejemplo muy claro de cómo la gravedad afecta a su velocidad es donde se producen normalmente la retención de estos líquidos, como son las zonas más bajas del cuerpo como piernas y especialmente los tobillos ya que al ser las zonas más bajas la gravedad hace que estos líquidos bajen y frena su ascenso.


La respiración: 


Por último pero no por ello menos importante, los movimientos profundos que se producen en la respiración permiten ayudar a la circulación linfática ya que ejercen una acción de bombeo, es por esto que una vez más la actividad física es un factor determinante cuando hablamos de mejorar el sistema linfático.

 www.cofenat.es